Adaptar tu casa a la llegada de una mascota

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¿Es tu primera vez con una mascota en casa? Los animales llegan a formar parte de nuestra familia, pero los inicios pueden llegar a ser difíciles. Adaptar tu casa a la llegada de una mascota es lo mejor que puedes hacer antes de que llegue. Prepárate bien para que tanto el animal como tú estéis cómodos. Además, las mascotas adoran las costumbres. Ya sean gatos o perros, cuando se adaptan a algo es muy complicado sacarles de esa rutina. Por lo tanto, asegúrate de que todo está a tu gusto para intentar realizar los mínimos cambios en un futuro.

En Palanca Fontestad vamos a ayudarte a adaptar tu casa a la llegada de una mascota. ¡No te pierdas estos trucos!

Adaptar tu casa a la llegada de una mascota

Como ya hemos dicho, lo mejor que puedes hacer es preparar tu vivienda para la llegada de tu mascota. Por eso, ahí van al menos 4 cosas generales que debes tener en cuenta antes de que tu nuevo mejor amigo llegue a casa.

Toma nuevas medidas

Tus viejas costumbres ya no valen. Ahora hay cosas que deberás tener en cuenta. E incluso que deberás corregir. Por ejemplo:

Esconde los cables. Tanto si quieres a tu mascota como si quieres tus aparatos eléctricos.
Productos de limpieza y medicamentos. Procura que no estén a su alcance. Pueden ser altamente tóxicos para ellos y puedes llevarte un buen susto.
Objetos pequeños. Ya no podrás no recoger ciertas cosas. Sobre todo si se trata de perros grandes, hay cosas que pueden tragarse que pueden ser tóxicas. O encajarse en su garganta. A partir de ahora, revisa con lupa el suelo.
Plantas y flores. Infórmate bien, ya que algunas son peligrosas para ellos.
Escaleras y balcones. Si adoptas a un cachorro, mucho cuidado. Puedes colocar pequeños barrotes o vallas para que no puedan pasar por estos sitios.

Establece su cama

Los animales necesitan tener un lugar que les pertenezca. Por lo tanto, coloca su cama donde sea que vaya a estar siempre. Colocales una cama cómodo y confortable para ellos. Además, evita que su espacio sea el mismo que el tuyo. Es decir, evita tu habitación para colocar su cama. Debes distinguir espacios.

Prepara los productos que vas a necesitar

Los animales no van a necesitar lo mismo que tú. No puedes cepillarles el pelo con tu peine, por ejemplo. Por eso, antes de que llegue tu mascota, asegúrate de que tienes todo lo que va a necesitar. Estas son algunas cosas con las que puedes (y debes) hacerte:

Su comida. Evidentemente, averigua qué tipo de comida va a necesitar tu nuevo amigo y hazte con ella. Un pequeño consejo: al igual que con su cama, establece un lugar predeterminado para que comas.
Productos de higiene. Peines, toallas, champú, cepillo o cortauñas.
Juguetes adecuados a sus necesidades y tamaño.
Chuches o premios para compensarle cuando haga algo bien.
Algo que podría irte bien es una chapa identificativa. En caso de que se perdiese, sería mucho más fácil encontrarlo y que te encontrasen.

Prepara tus muebles

Algo que debes tener claro es que tus muebles pueden convertirse en su entretenimiento. Y más, si es un cachorro. Puede que incluso haga sus necesidades sobre ellos hasta que se enseñe a hacerlo donde debe.

Unas fundas para los sofás pueden ser tus mejores aliadas. Además, existen unos sprays que no son perjudiciales ni para ellos ni para ti. Pero que sí les resultan molestos. Puedes echarlos sobre algunos muebles o cortinas. Así evitarás que quieran acercarse a ellos y que los dañen. Pero debes prepararte para algún desastre que otro.

Una vez ya hayas podido adaptar tu casa a la llegada de una mascota, simplemente prepárate para disfrutarla. Tener animales en casa nos hace más felices. Nos sentimos acompañados y, además, nos consuelan en nuestros malos momentos. Pero siempre, toma esta decisión de una forma responsable. Y hazles la vida más fácil.